Por eso KANO viejo, porque estás en nuestros corazones y siempre lo estarás, te damos este merecido homenaje. Y claro está, todos los que visiten este sitio pueden opinar acerca de Kano, las anécdotas que tengan con él... si algún día llegaron a conocerlo en persona o quisieran hacerlo... cuenten.
Ah, y algo muy importante... no se aceptan comentarios sobre el Kano nuevo... es decir, aquel de vestimenta roja, el del MK3. Por nuestra religión, ese Kano es considerado una farsa, una burda copia del KANO VIEJO, el único, el verdadero, el real... Madrid.
Aquí les mostraremos toda su biografía, sus idas y venidas, sus dimes y diretes, sus trucos, sus fatalities, su vida en fotos.
Pero el blog no trata solo sobre KANO VIEJO, no no... eso es solo la puntita del iceberg. También van a encontrar muchas otras cosas, tan o más importantes que la Friendship de Kano.
Bueno... creo que eso es todo. Un gran abrazo.
3 comentarios:
Holis, bueno chicos les cuento que mi nombre es Lucrecia soy de Sinsinate,Klvelan en Oklahoma.Bueno queria contarles de mi encuentro con Kano. Estando yo comprando ricota en lo chino para hacer un pie de salame. una receta que me lego una tia que no va al caso mencionar. Bueno la cuestion es que lo veo al principio pense que era telerman pero cuando miro ahi estaba parado junto a la seccion untables. Acercoseme, habloseme y escupiome mientras hablome. Yo invitole a mi casa a mi casa a toamr un te de mansanilla con miel de tabano californiano de tres patas y rl aceptole\se\me...acepto. Fuimos para mi casa y empezo a ponerse cachondo yo una damisela paraguaya afiliada a las mujeres adoradoras y esclavas de la piedra pomes no pude resistrime y le hice un pete. La cuestion es que cuando acabose tenia puesto el casquito ese que tiene el ojito rojo, el cual fue energicamente despedido me entro por la frente y termino alojandoseme en la cuarta lumbar. Tube que ser intervenida varias veces en lo del dotor cormillot hasta que lograron extraerme la porueria esa. Estas lineas las escribe mi sobrinita Feolfa ya que desde el dia del accidente que estoy menos activa que polino.
Gracias por dejar contar mi historio me despido con una frase Majadma Minujin que dijo: " Hasta cabildo y Lacrose, por favor"
hola mi nombre es teo, por no decir q me llamo teobaldo...
me dedico a la venta de carton, por no decir q soy cartonero.
recolecto tambien entre otros derivados y aleaciones de metal..
por no decir q soy chatarrero.
bueno ya hable demasiado de mi..
yo al igual q ustdes soy un fan de kano, y desde q tengo uso de razon lo he estado siguiendo a escondidas...me intriga mucho y de echo pienso q con coraza de chapa q tiene en su cara podria hacerme millonario.
por eso me dedique a seguirlo continuamente, asi tipo espia pero no tan asi..
mi primer encuentro con el fue en un restobar chino, en el cual el trabajaba fileteando pescados y prepàrando deliciaas del medio oriente, segun x lo q le entendi al chino dueño del local.
en el casting de cosineros, el habia obtenido una gran habilidad con su hacha/pico, lo q le brindaba una gran capasidad de fileteo y ahorro de tiempo al preparar los platillos.ademas de esto me dijo q el q lo incentivo a meterse en el mercado de la comida china fue liu kang.
bueno m fui de tema... en lo q yo apunto en seguirlo es si en verdad al dormir el se saca esa coraza..
nesesito esa coraza,
hoy en dia lo sigo siguiendo...
pero ustdes no dibulgen la bola, yo no quiero q el se de cuenta..
m estoy haciendo bien el pelotudo..
bueno..
chau
nesesito tomar un poco mas psicofarmacos.. y llego tarde al tren q me lleva el carro con carton..
saludos
y no se alarmen si kano deja de tener su coraza..
rastaman... "listen reggae music"
Ojo por ojo, diente por diente. Ese refrán es más que nada para agarrarse a trompadas con totales desconocidos que te apoyan en el subte al grito de THIS IS SPARTA!, y luego se tiran por la ventanilla. Pero no es mi caso, devuelvo la modestia por haberse pegado un vuelta por mi humilde pero no limpio blog.
Ah, la movida es contar como fue mi encuentro con Kano? Avisá, boló.
Una tarde cálida de otoño. Encontrabame yo esperando el tren de la alegría de turno, solo con la esperanza de agarrarme a golpes con el Topo Giggio, solo por diversión que me inculcaron los skinheads que me criaron, cuando me encontraron adentro de una bolsa de papel a la tierna edad de 14 años. También me pegaron la costumbre de hacer los pasitos de Jamiroquai en pelotas, pateando todo lo que este en un radio de 3 metros.
Resulta que cuando llega dicho tren, y subo a propinar golpes con un libro de Blanca Curi, me encuentro con que están todos hechos boleta!
Al fondo del tren, se veía una silueta misteriosa. Súbitamente lo reconocí. Era él.
- VICTOR SUEIRO!- grito eufórico.
- No, pelotudo.- Y acto seguido, le perfora la gamba a Pantriste con un rayo que le salia del ojo.
Ahí fue cuando lo supe.
-CICLOPS!
En el aire hace su aparición un objeto contundente, donde el trayecto comenzaba en la mano del individuo, y culmina en el punto ciego entre mis ojos.
Es en ese momento en el que se me acerca, y logro reconocerlo perfectamente.
- KANO!
- Era hora. Si la boludez viniera en vasitos, a vos ten dan 3 baldes.
Un silencio incomodo. Luego rompemos a reír frenéticamente.
Le pregunté porque se le dió por masacrar a esta gente.
- Los muy forros me apoyaron en el subte.
- Ah sí. Suele pasar.
Luego de eso jodimos todo el resto de ese día.
Fuimos a hacer malabares a la 9 de Julio con pequineses y pigmeos.
Luego fuimos a ver una obra de teatro llamada "Caperucita Roja y Ronnie Arias visitan a Fernando Bravo montados en un Fiat 600".
Más tarde fuimos a unirnos a una sociedad oculta donde adoran al demonio de Tazmania. Fuimos testigos de varios sacrificios y yo maté un mapache a mano limpia. Fue memorable.
Y para culminar la noche, fuimos a hacer pantomima a un boliche llamado "El baile del sobaco".
Luego de eso no recuerdo más. Me desperté al día siguiente, en la estación de Moreno, completamente en bolas, con una foto de Carla Conte pegada en la nuca, y con un aforismo de Diego Capusotto tatuado en el gluteo izquierdo. Más allá de eso, fue uno de los mejores días de mi vida. Desde entonces no lo ví más, pero no olvidaré de nuestras desventuras de aquel día.
Ahora, si me disculpan, me voy a tratar de superar mi antropofobia, cortandole el flequillo a un rollinga que se pone en pedo en la esquina de mi casa.
Au revoir.
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